Hacer la maleta

Siempre recordare la imagen de mi madre haciendo una maleta mientras dice “ y esto por si acaso”. ¿Por qué? Pienso cada vez que se repite. Esta genial ser precavido, pero ¿hacen falta tantas cosas para un fin de semana?. Mi consejo es HAZ UNA LISTA.

Con los años he aprendido a no cargar con kilos de más, ni a quedarme sin lo necesario. Lo primero por supuesto es saber elegir la maleta adecuada para cada viaje. Cuando sé que voy a facturar opto por una maleta más resistente. Es increíble los destrozos que pueden hacer  en algunos aeropuertos del mundo. Además pensad que si llueve y vuestra maleta tarda en subir al avión podéis recogerla empapada. La maleta y lo que es peor, su contenido.

Si es para una escapada muy corta, sencillamente cojo lo esencial en una bolsa de viaje. Me encantan los bolsones de piel. Podéis comprarlos en Las ventas con Peña Aguilera, un pueblo de Toledo que se dedica a la artesanía de piel. Hay varios talleres artesanos que tienen venta directa al público. Sobre todo trabajan cuero y ante. Este tipo de maleta es solo un acierto si vas de puerta a puerta porque son preciosos, pero reconozco que no muy cómodos.

Si se trata de más días  confieso que a mí también me cuesta elegir sólo una pequeña parte del armario. Lo que hago es optar por prendas que pueda usar con varios looks, por ejemplo, una chaqueta negra de punto que me pueda poner tanto con un vaquero como con un vestido de noche. Para estos viajes elijo un pequeño trolley de tamaño standard.

Mi truco es, hacer una lista con los conjuntos que voy a llevar. Es decir, escribir en un folio absolutamente todo lo que te vas a poner y cómo vas a combinarlo. Os aseguro que es una gran idea con la que se gana muchísimo tiempo durante el viaje y se viaja solo con lo imprescindible.

Para los cosméticos hay distintas opciones. Podéis acercaros a Muji o a Sephora y comprar un kit de viaje. Esos pequeños recipientes con su respectivo embudito para no malgastar ni una gota de tus productos más preciados Estos kits te permiten llevar a mano todo lo necesario, con el máximo de 100ml que piden las normas. Además de los más básicos hay un estuchito para lentillas, papeles anti-brillos e incluso un rizador de pestañas mini. Vamos, todo un lujo.

Si eres más vaga y no te apetece ponerte a rellenar los botes el día antes de irte de viaje, te recomiendo que te pases por cualquier supermercado.  Hay bolsitas de viaje que incluyen champú, gel, crema hidratante y algunas otras cosas. Un claro ejemplo es la marca Dove.

Por último resaltar la inteligencia de algunas firmas de cosméticos. Hace unos días me regalaron  una pequeña joya, podeís verla en la foto de abajo, al comprar una igual de tamaño normal. ¿Qué os parece? Es increíble lo diminuta y práctica que es a la vez. Animo a que todas las marcas de maquillaje sean tan amables como Chanel y cuiden más a sus clientas… porque sin nosotras no tendría sentido nada.